El cambio climático constituye una amenaza permanente a la salud de la población del Chaco.
La población indígena es la más afectada, debido a las dificultades de acceso al agua en las áreas rurales.
Otro aspecto que vulnera considerablemente a las poblaciones indígenas es la falta de acceso a una atención institucionalizada. El sistema oficial es deficiente para atender la Salud de la población y solo la clase alta goza de mejores atenciones en materia de salud pública.
Algunas de las afecciones que han venido azotando a las poblaciones vulnerables chaqueñas tienen que ver con el paludismo y el dengue, a lo que se suman otras causas de mortalidad, tales como la malnutrición y las diarreas. El cambio climático está contribuyendo a la carga mundial de morbilidad y se prevé que su contribución aumentará en el futuro.